La Mosca de la fruta es una de las plagas más temidas por los agricultores y que genera millones de soles en pérdidas al año, perjudicando la producción hortofrutícola de las zonas donde ataca, es por el ello que el Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa, del Ministerio de Agricultura y Riego, viene trabajando constantemente en su control y erradicación en las diferentes regiones del Perú.
En la región Tumbes, el Senasa, mediante su red de trampeo en los distritos fronterizos de Uña de Gato, Papayal, Aguas Verdes y Matapalo, ubicadas en la provincia de Zarumilla, monitorea mediante sus 28 trampas oficiales(14 multilure y 14 jackson) la incidencia poblacional que presenta la mosca de la fruta en esta provincia de la región; estas trampas que son evaluadas por el especialista cada 7 días, han reportado mayor captura de la especie Anastrepha Fraterculus.
Esta especie de mosca de la fruta, es originaria de Brasil, siendo muy polífaga, ataca gran variedad de hospederos silvestres y cultivados como: guayabas, uvas, nísperos, ciruelas, papayas, mangos, cítricos, etc. El daño que causan se conoce como oviposición, introduciendo sus huevesillos para el desarrollo de la larva dentro del fruto; la hembra puede pegarse varias veces a la fruta en busca de un sustrato ideal para su oviposición, las larvas se alimentarán de la pulpa del fruto, provocando una maduración prematura de la fruta originando una pudrición del fruto que queda inservible para el mercado.
Dentro de las estrategias empleadas para el control de esta plaga, el Senasa viene capacitando en el uso del control mecánico – cultural, parte fundamental dentro de las actividades comprendidas en el Control Integrado de mosca de la fruta, estos trabajos implican en el recojo y entierro de frutos caidos y sobremaduros, rastrilleo de suelos, podas de sanidad y lavado de árboles. Siendo este método como el más eficaz en el control de esta plaga, ya que corta el ciclo biológico de la mosca de la fruta.
Otro método que también pueden utilizar los agricultores es el control etológico, que es la elaboración de trampas caseras utilizando atrayentes sexuales, alimenticios y atrayentes visuales, aprovechando en su contra el comportamiento y hábitos de vida del insecto para su control.
La región Tumbes posee más de 680 hectáreas de cultivo hospedante de mosca de la fruta, siendo la provincia de Zarumilla donde se encuentra la mayor producción frutícula con un aproximado de 600 hectáreas, dejando a las provincias de Tumbes y Contraalamirante Villar con 43 y 40 hectáreas respectivamente; resaltando los cultivos de ciruela, mango y cítricos como los de mayor producción local.