El Ministerio de Agricultura y Riego (MINAGRI), a través del Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa, intensificó la fiscalización de 18 establecimientos comerciales dedicados a la venta de insumos agrícolas en las provincias huancavelicanas de Acobamba, Tayacaja y Colcabamba.
La medida, que tuvo por finalidad verificar el cumplimiento de la normativa vigente DS N° DS N° 001-2015-MINAGRI por parte de los propietarios y administradores de los comercios agrícolas, se realizó en tres establecimientos de las provincias de Acobamba, seis en Tayacaja, tres en Colcabamba, mientras que en el distrito Paucará fueron seis.
Durante la diligencia se comprobó si los productos agrícolas contaban con el registro sanitario de Senasa para evitar el comercio de insumos adulterados, de contrabando o caducos; así como el correcto almacenaje de los productos y contar con la autorización de la autoridad sanitaria.
Declaraciones
“La fiscalización in situ nos permite conocer el estado real del cumplimiento de las normas vigentes y el correcto procedimiento de parte de los propietarios y administradores de los centros de expendio de productos agroveterinarios. En algunos casos se les ha notificado a los comercios que no cuentan con la autorización sanitaria, para que puedan iniciar el proceso ante el Senasa”, señaló el especialista de Insumos Agropecuarios e Inocuidad Agroalimentaria, Roy Ynga Avila.
El especialista hizo un llamado a los agricultores para que al momento de adquirir un producto agrícola, verifiquen que tenga el registro sanitario del Senasa, la fecha de vencimiento y, en caso de dudas, asesorarse con los servidores del campo que laboran en cada uno de los Centros de Trámites documentarios (CTD) ubicado en cada provincia.
De acuerdo al DS N°001-2015-MINAGRI, el control, registro y fiscalización a nivel nacional de los productos agroveterinarios se realiza con la finalidad de prevenir y proteger la salud humana y el ambiente, garantizar la eficacia biológica de los insumos, así como orientar el manejo adecuado mediante la adopción de buenas prácticas agrícolas y de almacenamiento.
