El Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa capacitó en medidas de bioseguridad a los trabajadores de la granja avícola Proavisa E.I.R.L, una de las más importantes en postura comercial de la región San Martín.
La Bioseguridad en crianzas tecnificadas es una pieza fundamental para el éxito de una campaña; ésta va acompañada de acciones o programas sanitarios que, aplicados a cabalidad, evitan la entrada de cualquier agente etiológico y la posible ocurrencia de enfermedades.
La enfermedad de Newcastle y la bronquitis infecciosa, entre otras, son recurrentes en los establecimientos carentes de directivas realizadas por el plantel, constituyéndose en un problema que acarrea bajas en la producción y, en consecuencia, pérdidas económicas.
Es por esta razón que los servidores del campo del área de Sanidad Animal realizan jornadas de capacitación a fin de revertir este revés.
Precisamente, los servidores del campo del Senasa capacitaron a 14 empleados de Proavisa, granja tecnificada que cuenta con una población de 55 mil aves.
Según el especialista encargado, Daniel Vela, la bioseguridad conlleva un conjunto de acciones directas que todos los empleados deben realizar dentro de la granja para conservar el buen estatus sanitario de la misma. “Hablamos de medidas indispensables. Ellas deben estar plasmadas en un documento interno al que los empleados puedan consultar, de manera que sean como una norma a cumplir de forma permanente”, advirtió.
Medidas como el vacío sanitario (periodo prudencial que permanece la granja vacía desde que se ha realizado la limpieza y desinfección del galpón y los exteriores hasta la nueva entrada de aves), desinfección de vehículos a la entrada y salida de un núcleo, un diario de ocurrencias, el control de visitas y el baño obligado de toda persona al ingresar al establecimiento.
A estas medidas se suman el control de roedores y aves silvestres, ya que estos transmiten enfermedades y comen el pienso contaminando la misma, las fumigaciones, jornadas de limpieza, y todas las actividades que en complemento garantizarán la conservación del estatus sanitario y que deberán ser aplicadas los 365 días del año.
La región San Martín cuenta con 55 granjas registradas, 40 dedicas la producción de carne y 15 dedicadas a la postura comercial.