Los exportadores peruanos de uvas deben prepararse para competir con eficiencia en la exportación de grandes volúmenes, y pensar en posicionar marcas y la mejor calidad del origen Perú en el mercado norteamericano, señaló la Ocex del Perú en Nueva York.
Fuente: Gestión
El Perú se ha consolidado como el segundo país exportador de uvas hacia Estados Unidos y el quinto a nivel mundial, señaló la Oficina Comercial del Perú – Ocex en Nueva York.
Estas exportaciones peruanas al mundo superaron por primera vez los US$ 700 millones en el 2015, dirigiéndose cerca de US$ 200 millones hacia Estados Unidos, superando incluso a la suma las exportaciones de uva peruana hacia China y Hong Kong.
Este cultivo es actualmente el alimento fresco peruano de mayor exportación, sobrepasando al espárrago.
La exportación peruana de uvas en sus inicios alcanzaba unas 600 toneladas y se concentraba en la época del verano nórdico y el año nuevo chino, momento en que pocos países podían cubrir la demanda mundial y el precio era sumamente elevado.
El crecimiento fue sostenido y las ventas al exterior alcanzaron durante el año 2008 los US$ 31.6 millones, cuando se logró el acceso formal de uva peruana a Estados Unidos con el protocolo sanitario coordinado entre Senasa y la oficina correspondiente del United States Department of Agriculture (USDA).
Desde entonces el crecimiento promedio abarca los cientos de millones de dólares por año.
El mercado
En el año 2016, el mercado de uvas en Estados Unidos alcanzó los US$ 2,700 millones, incrementándose en 6.7% respecto del año previo.
Esta mayor demanda por uvas se explica porque se trata de una fruta muy fácil de comer -inclusive por niños-, a su disponibilidad durante todo el año en los diversos mercados y al creciente deseo por comer productos frescos y saludables.
Destacó que las uvas tienen diversos beneficios para sus consumidores específicamente en temas como la visión, la presión alta, la diabetes y enfermedades del colon, además de contener valiosos antioxidantes.
Oferta mundial
La revista “The Packer” estima que la producción mundial de uvas subirá de 20 millones a 21.9 millones de toneladas durante el 2017, lo que implicaría bordear un incremento de 10% anual y continuar el importante desarrollo de este mercado.
La maduración de los mercados, normalmente, lleva a una gradual disminución del precio promedio del producto, sacrificándose algo de rentabilidad a cambio de mayores volúmenes de ventas.
Chile, México y Argentina han incrementado su producción buscando entrar al mercado en los momentos de menor oferta y mayor precio.
Así, la cosecha chilena ahora comienza desde diciembre, tratando de competir con el producto peruano ya posicionado en ese momento del año, aunque los mayores volúmenes se dan algunos meses después.
Algo que es de gran ayuda para la industria peruana es que la demanda asiática por el año nuevo chino se incrementa y buena parte de la producción peruana se vende a los altos precios que se paga en esos países durante esa temporada.
Lo que se ha percibido en el caso de Estados Unidos a comienzos del 2017 es que el aumento del precio no ha sido tan importante como en años anteriores, pero sí se ha visto afectado por la escasez de producción local durante el invierno nórdico.
Así, frente a enero del 2016, de acuerdo al reporte de precios del USDA en todo el país, las uvas se vendían a niveles de apenas la mitad comparado con principio del mismo mes de este año.
En la mayoría de supermercados en Manhattan, Nueva York, el precio alcanzó en enero del 2016 los US$ 3.99 por libra, y para fines de ese mes en algunos supermercados el precio subió a US$ 4.99 por libra.
En tiendas “gourmet” los precios se elevaron hasta US$ 5.99 por libra o hasta US$ 6.99, que solía ser el precio en supermercados en temporadas invernales anteriores.
En cambio, en tiendas de volumen como la cadena de Costco, los precios por libra fluctuaban entre US$ 2.50 y US$ 1.60 -este último con semillas-, pero se tenía que comprar paquetes de entre cuatro y cinco libras. Muchas de estas uvas eran peruanas y tenían marcas como Rio Perú, Goin Ape o Sweetums.
Entonces, si bien el Perú siempre debe aprovechar las ventanas de precios altos que se presentan en cada mercado, también los exportadores deben prepararse para competir con eficiencia en la exportación de grandes volúmenes, y pensar en posicionar marcas y la mejor calidad del origen Perú en el mercado norteamericano.