Con el objetivo de fortalecer la capacidad de reacción, la atención oportuna y eficiente de sus servidores del campo y criadores de vacunos ante la ocurrencia, bastante lejana, de un brote de Fiebre Aftosa, enfermedad no presente en el Perú, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa realizará un simulacro de contingencia de la enfermedad en la región San Martin.
De esta manera el Senasa cumple con los lineamientos señalados por el ministro de Agricultura y Riego – Minagri, Gustavo Mostajo Ocola, de atender a las familias dedicadas a la pequeña y media agricultura, protegiendo en este caso, sus posesiones más preciadas, su ganado.
Del miércoles 11 al viernes 13 de abril próximo, los servidores del campo pondrán a prueba sus sistemas de detección temprana, análisis epidemiológico, medidas de control cuarentenario, vacunación, desinfección de animales y ambientes, acciones que se desarrollarían de confirmarse el ingreso de la enfermedad.
El Minagri desarrolla permanentemente estas medidas de prevención para evitar el ingreso de enfermedades que afecten la producción nacional. Para ello, el Senasa cuenta con más de 50 puestos de control en el territorio patrio, realiza monitoreo de bovinos y ejecuta, mínimo, tres simulacros de atención sanitaria al año.
No se ha reportado un solo caso de Fiebre Aftosa en el Perú desde junio del 2004. Desde el 2015 hasta el 2017, como medidas de prevención se vacunaba en la frontera norte (que representaba el 1.64% de nuestro territorio). Hoy, ser país libre sin vacunación, le significa al Perú un ahorro de 10 millones de dólares anuales en prevención y cuenta con este respaldo que abre las puertas a mercados internacionales, en beneficio de la economía nacional, principalmente de los ganaderos peruanos.
Esta condición sanitaria es compartida por la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá, México, Chile y parte de Argentina. La Fiebre Aftosa es altamente contagiosa, puede presentarse en el ganado vacuno, ovino, caprino, porcino y camélidos sudamericanos; limita de manera drástica el comercio internacional y disminuye la producción de leche y carne.
