Bajo el lema “La papa te pone punche”, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (MIDAGRI) a través de Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA), viene desplegando acciones fitosanitarias orientadas a proteger la sanidad de los cultivos de papa que se producen en 19 departamentos del país.
Según el MIDAGRI, en el país existen alrededor de 330 mil hectáreas de cultivos de papa, que pueden presentar problemas fitosanitarios causados por plagas comunes, como la rancha, complejo de gorgojo de los andes, complejo de polilla de los andes o plagas cuarentenarias como la tecia solanivora, zebra chips, entre otros.
Para ello, el SENASA trabaja permanentemente en la atención de las notificaciones de los productores e instruyéndolos para un adecuado manejo integrado de plagas (MIP) en campo, logrando que en los últimos años un total de 11,042 productores se capaciten de manera teórica y práctica.
La estrategia fitosanitaria también contempló el desarrollo de 625 escuelas de campo que ha logrado fortalecer, por un periodo de 6 meses, los conocimientos en Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) de 12,452 productores de las comunidades campesinas más alejadas de la sierra peruana.
Desde el campo hasta la cosecha
El uso de semilla certificada es primordial en la producción de papa, por ello, el SENASA como autoridad en materia de semillas (declarada desde el 17 de junio del 2020), realiza un trabajo articulado con 900 productores de semillas de papa, ubicados principalmente en las regiones de Cusco, Apurímac, Huancavelica, Huánuco, Junín y Ayacucho.
De esta manera, los especialistas del SENASA mantienen un seguimiento constante en el proceso de registro, autorización y certificación de calidad de las semillas del tubérculo andino. Como se sabe, el uso de semilla de calidad contribuye a mejorar el rendimiento de la producción hasta en un 70%.
La importancia de la producción de papa no solo se presenta en el contexto nacional, sino que también en el ámbito internacional, considerando que el Perú es el primer productor de papa en América Latina y actualmente, cuenta con protocolos fitosanitarios para acceder a 14 mercados internacionales como Bolivia, Brasil, El Salvador, Panamá, Kirguistán, Paraguay, Uruguay, Rusia, Singapur, Dubái, Emiratos Árabes Unidos, Hong Kong, Francia y España.