El Ministerio de Agricultura y Riego, a través del Senasa, anunció que el programa de erradicación de mosca de la fruta que se desarrolla desde el 2012 en la región Áncash, registró la atención de 36 105 productores al cierre del presente año.
Las intervenciones sanitarias han permitido un cambio exitoso en la producción frutícola con el cultivo de uva, mango, cítricos, higo, palta, espárrago y arándanos, superando en algunas zonas la siembra de maíz, algodón y papa.
El Senasa realiza el monitoreo permanente de 109 216 hectáreas distribuidas en Áncash para tener un reporte semanal actualizado del comportamiento de la mosca de la fruta y ejecutar acciones estratégicas para su erradicación.
La mosca de la fruta constituye una de las principales plagas que restringen el acceso de frutas frescas a mercados internacionales, por lo que los países importadores aplican medidas fitosanitarias muy rigurosas para mitigar el riesgo del ingreso de esta plaga a sus respectivos mercados.
La erradicación de mosca de la fruta se basa en la ejecución de un Plan de Control Integrado, el cual está conformado por labores de Control Cultural, actividad enfocada al recojo y entierro de frutos caídos y remanentes; Control Químico, método que implica la aplicación de Cebo Tóxico en los diferentes predios hortofrutícolas; el Control Legal, orientado al cumplimiento de reglamentos y directivas del Ministerio de Agricultura y Riego.
Para erradicar esta plaga, se dividió la región en 12 zonas de producción. Actualmente, 7 zonas de producción se encuentran en la etapa de supresión, 4 zonas en etapa de prospección y monitoreo, y 1 zona en etapa de erradicación.
La participación de los productores es fundamental para erradicar la plaga y mejorar el estado fitosanitario del país. Sin la mosca de la fruta todos los mercados internacionales estarán dispuestos a importar los productos de Áncash, sin ninguna barrera.