Madre de Dios: Senasa certifica más de 249 mil kilos de castaña para exportación

4976

Madre de Dios - Senasa certifica más de 249 mil kilos de castaña para exportaciónCon el objetivo de verificar que los cargamentos de castaña cumplan con los requisitos fitosanitarios de exportación, el Ministerio de Agricultura y Riego – MINAGRI, a través del Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa, certificó en Madre de Dios 249 mil 301 kilos de castaña seca pelada durante el 2017.

La inspección física de la castaña se realizó en los almacenes de empresas dedicadas a la exportación; los especialistas del Senasa evaluaron el estado fitosanitario y que estén libres de plagas cuarentenarias, hongos y otros contaminantes que pueden afectar el producto.

También verificaron que la castaña esté envasada en bolsas aluminizadas y embaladas en cajas de cartón corrugado para garantizar que el producto llegue en buen estado al país importador, tras lo cual emitió el Certificado Fitosanitario de Exportación.

La castaña es considerada un producto bandera de la región Madre de Dios; se produce mayormente en los sectores de Alto Muyumanu del Cp. Alerta, distrito las Piedras – provincia de Tambopata, y zonas aledañas a la provincia de Tahuamanu. La exportación de castaña es para los países de Estados Unidos y Corea del Sur.

La producción de castaña ocupa el 30% de la superficie de la región Madre de Dios, beneficia aproximadamente a 20 mil familias de manera directa e indirecta e implica el 67% del total de los ingresos de las familias vinculadas a esta actividad.

La castaña amazónica

La castaña amazónica (Bertholletia excelsa) es oriunda de la Amazonía peruana, brasileña y boliviana, y en nuestro país se le encuentra en Madre de Dios; un árbol de castaña alcanza madurez a los 15 años y su máxima producción a los 25.

Su periodo de vida es de 100 a 200 años y produce alrededor de 300 frutos del tamaño de un coco, el mismo que encierra alrededor de 15 castañas. Cada uno demora en promedio dos años en madurar y durante la temporada de lluvia cae al suelo, lo que da inicio a la etapa de recolección, de la cual se encargan los llamados ‘castañeros’.  La castaña con cáscara tiene buena demanda en los días de Navidad, mientras que la castaña pelada se consume todo el año en helados, dulces y postres. Las castañas rotas sirven para aceite, harina, aderezos, salsas, sopas, leche y champú.