El Servicio Nacional de Sanidad Agraria –Senasa ampliará la cobertura del método de control biológico en la producción agrícola de la región Junín, como medida alterna a los agroquímicos para reducir la incidencia de plagas de manera amigable con el ambiente y el agricultor.
Durante el 2017, el Senasa promovió el uso de controladores biológicos en diversos predios de cultivo sumando un total de 825 hectáreas (ha). Para este año, se ha proyectado alcanzar un área de trabajo de 960 hectáreas.
De esta manera, se ejecutarán trabajos en 23 distritos de las provincias Satipo, Concepción, Chanchamayo, Huancayo, Jauja y Junín, propiciando la reducción del uso de agroquímicos para disminuir los riesgos en la salud del agricultor, la toxicidad de los alimentos y reducir la contaminación del medio ambiente.
La aplicación de los controladores biológicos se efectúa en los principales cultivos o cultivos de importancia económica producidos en los distritos ubicados en la zona nororiental de la región, entre ellos, está la palta en sus variedades Hass y fuerte; así como el frejol, maíz y zapallo.
El año pasado se benefició a 563 productores, de los cuales 118 hicieron uso de estos organismos en sus parcelas. Los agricultores aplicaron los controladores biológicos en diferentes cultivos, como en el café (403 ha), cítricos (178 ha), lúcuma (79 ha), hortalizas (44 ha), kion (32 ha) y plátano (28.5 ha), entre otros.
El control biológico consiste en controlar la población de plagas mediante enemigos naturales, como la acción de insectos predadores, parasitoides y microorganismos que causan enfermedades a las plagas (Entomopatógenos) o controlan enfermedades en las plantas (antagonistas).
El Senasa fomenta este método como una herramienta dentro del manejo integrado de plagas, que forma parte de las buenas prácticas agrícolas. Estos organismos actúan de forma natural sin contaminar las cosechas, tampoco hay riesgo en el ser humano y es un insumo ideal para la producción orgánica.