El Ministerio de Agricultura y Riego, a través del Servicio Nacional de Sanidad Agraria – Senasa, está supervisando la ejecución de las pruebas diagnósticas de Brucelosis bovina que ejecutan los médicos veterinarios de la actividad privada (debidamente registrados) en las provincias Chincha, Pisco, Ica, Palpa y Nasca, de la región Ica.
La actividad está enmarcada dentro del programa de Control y Erradicación de Brucelosis bovina, la misma que se ejecuta a nivel nacional, dando preferencia a las áreas de crianza intensiva de ganado bovino lechero y mediante la cual se ha muestreado 7 801 animales contra de esta enfermedad zoonótica (que se transmite al humano).
El examen diagnóstico para descartar la Brucelosis bovina consiste en la extracción de sangre, separación del suero y la prueba Rosa de bengala (prueba de campo); de salir positivo, se ejecuta una segunda prueba confirmatoria.
En Ica, esta enfermedad se está controlando con las acciones permanentes del Senasa y la participación de productores y médicos veterinarios de la práctica privada, bajo supervisión de la autoridad sanitaria. El monitoreo se extiende a todos los establos de ganadería lechera de la región, el mismo que forma parte del sistema de vigilancia epidemiológica.
La Brucelosis bovina es una enfermedad infecciosa de distribución mundial y de gran importancia económica. El impacto económico radica en la reducción en la fertilidad del hato, esterilidad, abortos, nacimiento de terneros débiles, orquitis, epididimitis y disminución de la población bovina por sacrificio de reactores, en perjuicio económico de los productores y sus familias.
Los abortos a causa de la citada enfermedad, se presentan pasando el quinto mes de gestación. En caso de machos infectados, se produce inflamación de los testículos (orquitis).
Senasa recomienda notificar oportunamente cualquier sospecha de esta enfermedad, para que los médicos veterinarios puedan tomar las medidas de prevención y control.