Con el objetivo de seguir fortaleciendo la ganadería familiar en las comunidades más alejadas, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, a través del SENASA, implementó dos nuevas Escuelas de Campo, en la sierra de Chincha Alta; enfocadas a mejorar la producción lechera que se practica en la zona.
Las sesiones de aprendizaje se desarrollan en los Centros Poblados de Liscay y Bellavista, donde por primera vez, 50 pequeños criadores de ganado bovino vienen fortaleciendo conocimientos de manera responsable y sostenible promoviendo la ganadería familiar.
Se trata de las escuelas denominadas “Los inteligentes de Liscay” y “Los ganaderos de Bellavista”, cuyos participantes después de 12 sesiones, en 6 meses, serán certificados como productores graduados en Buenas Prácticas Ganaderas.
El objetivo es potenciar la crianza de bovinos para obtener una producción lechera y cárnica inocua, libre de contaminantes que pueda afectar la salud del consumidor y evitar rechazos por la industria láctea.
Con las jornadas de capacitación se asegura que la leche sea producida por animales sanos, de manera responsable y sostenible desde el punto de vista del bienestar animal, social, económico y medioambiental.
Por ello, durante las primeras sesiones de capacitación se explicaron temas relacionados a los 4 pilares fundamentales para un buen desarrollo ganadero, tales como, la genética, la nutrición, el manejo y la sanidad.
También se brindó instrucciones sobre cómo instalar corrales adecuados, cercos en buen estado, construcción de cobertizos para proteger a los animales de condición climática extrema, uso y calidad de agua, entre otros.