Con la finalidad de determinar los potenciales impactos económicos en el sector citrícola del país, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria -Senasa desarrolló el taller “Evaluación de las pérdidas económicas en la cadena productiva de los cítricos por el ingreso de la enfermedad Huanglongbing (HLB)”
El HLB aún no ha ingresado al país, pero al ser catalogada como la enfermedad más devastadora de los cítricos y carecer de cura, los trabajos de prevención son necesarios, como el taller que contó con la participación de representantes del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), la Asociación de Productores de Cítricos del Perú (Procitrus) y los actores de la cadena productiva de mandarinas de las provincias de Barranca, Huaura, Huaral y Cañete.
El taller participativo fue un espacio para la simulación de los probables daños que ocasionaría la presencia de HLB para la citricultura nacional y se cuantificaron las posibles pérdidas económicas para el país. De esta manera, se podrá elaborar un plan de trabajo detallado acorde a las necesidades de cada región.
Además se evidenció la importancia de invertir en prevención fitosanitaria, sostener las políticas en sanidad vegetal y comprometer la participación activa de los actores de toda la cadena productiva para evitar la introducción de la enfermedad y del vector.
En Huaral, el Senasa mantiene una red de vigilancia del HLB con 20 trampas oficiales distribuidas en aproximadamente cuatro mil hectáreas de cítricos ubicados en los sectores de La Esperanza, Palpa, Caqui, Chancayllo, Aucallama y Retes. También monitorea lugares considerados de riesgo como los viveros, donde se trabaja con material vegetativo de diferentes lugares del país.
La movilización de plantas, muchas veces de forma ilegal, representa un factor de riesgo para la producción local de mandarinas. Por esta razón, los servidores de campo enfatizan en las recomendaciones sanitarias y ejecutan charlas técnicas dirigida a los productores de los valles monitoreados, como medida de prevención para evitar el ingreso y establecimiento de la enfermedad.
Al evento también se dieron cita productores de cítricos de los valles de Sayán, Irrigación Santa Rosa y Huaral, exportadores, acopiadores, propietarios de viveros y representantes de entidades, como Agencia Agraria Huaral, Dirección Regional de Agricultura, considerados actores directos e indirectos dentro de la cadena productiva.