Como parte del programa de control de plagas emergentes que desarrolla el Ministerio de Agricultura y Riego, el Senasa dispuso medidas para el control integrado de roedores en más de 10 hectáreas ubicadas en los sectores de Cuyashpunru, Bellavista y Santo Toribio, pertenecientes a la provincia de Huaylas, en la región Áncash.
Los especialistas en sanidad agraria evaluaron los cultivos ubicados en diferentes predios de la zona, a través de la instalación de 50 trampas Thomahawk, que serán monitoreadas conforme se desarrollen las medidas sanitarias.
La presencia de roedores se debe principalmente a tres factores: disponibilidad de alimento, de agua y zonas de refugio. Por estas razones, todo el plan de manejo integrado de esta plaga está dirigido a modificar estas condiciones con la finalidad de reducir su incidencia.
Evaluación determinó un 44% de infestación, teniendo como principal factor para la proliferación de la plaga, la falta de limpieza en los predios de cultivos y acequias, donde estos animales establecen sus madrigueras.
Se dispuso el inicio de las labores de control cultural, enfocadas en la limpieza de canales y acequias, mejoramiento de las condiciones de crianza de animales domésticos y corregir los hábitos de limpieza en las viviendas ubicadas en zonas periféricas.
Si estas actividades no dan resultados, se organizarán brigadas de acción en coordinación con autoridades locales y se capacitará a pequeños productores para la manipulación y adecuado uso de rodenticidas en campo (control químico).
La presencia de roedores eleva los costos de producción y causa daños a la infraestructura. También puede ocasionar enfermedades a los humanos, por ello, es imprescindible para las zonas afectadas, controlar la plaga oportunamente y de manera efectiva.
