Para determinar la incidencia y daño de plaga de roedores, el Ministerio de Agricultura y Riego, a través del Senasa, evaluó 08 hectáreas ubicadas a lo largo del Callejón de Huaylas, en la región Áncash.
Los sectores donde se realizó el monitoreo son Matacoto, Ataquero, Parihuanca, San Miguel de Aco, Supluy, Maraca y Olleros caracterizados por ser zonas productoras de palta, melocotón, tuna, maíz, papa, zapallo, cítricos, aguaymanto y durazno.
Estas acciones sanitarias buscan actuar oportunamente frente a un caso determinado, y preparar a los productores y autoridades para que logren enfrentar la plaga, reduciendo los daños que pudiera ocasionar en sus cultivos.
La aparición de esta plaga en los cultivos se debe principalmente a tres factores: disponibilidad de alimento, de agua y zonas de refugio. Por estas razones, las estrategias el control están orientadas en modificar estas condiciones con la finalidad de reducir su incidencia y daños.
La autoridad sanitaria ha intensificado esta labor; debido a que existe la probabilidad de aparición de esta plaga por las constantes lluvias que se están presentando durante esta temporada.
La presencia de roedores eleva los costos de producción y también puede ocasionar enfermedades a los humanos, por ello, es imprescindible realizar acciones preventivas y de control efectivas.
Durante el 2019, el Senasa se proyecta evaluar 534 hectáreas, distribuidas en las 20 provincias de la región Áncash.
