Para mejorar la competitividad y la producción, pequeños productores del Valle de Cinto vienen trabajando con el SENASA en la implementación de las Buenas Prácticas Agrícolas en el cultivo de zapallo.
En total se han activado tres Escuelas de campo con la participación de productores de los sectores de Pampa Colorada, Montegrande y Pozo 1, en donde cada uno cuenta con parcelas desde 0,25 a 2 hectáreas.
Los agricultores son formados en el manejo del cultivo, cosecha y post cosecha, nutrición de plantas, uso y manejo de fertilizantes y plaguicidas; así como salud y seguridad del trabajador, para que de esta manera mejoren los niveles de producción de las familias campesinas.
Mediante estas enseñanzas los productores aprenden a realizar mejor su trabajo respetando el ecosistema y desarrollando estrategias que les permita mejorar la calidad de sus productos para acceder a mejores mercados
Con la aplicación de lo aprendido en las ECAs, los agricultores podrán presentar un plan de manejo sanitario adecuado para el control de plagas, especificando los productos aplicados y las medidas de control empleadas durante la campaña de producción que permitirá la certificación de más hectáreas de producción.
Las Escuelas de Campo son una metodología práctica y eficaz en donde el productor es el protagonista de su propio desarrollo e intercambia conocimientos con otros productores y el facilitador del Senasa, quien aporta novedades para gestionar problemas productivos, ambientales y organizativos.
La zona del Valle de Cinto cuenta con las condiciones del suelo y clima favorables para el desarrollo de cultivos de alta rentabilidad como el zapallo, lo que ha perimtido el incremento de áreas de producción.
